16 marzo 2016

Burrolandía


Burro paseos Madrid A unos 15 minutos de Madrid, en Tres Cantos, está Burrolandía. Un sencillísimo lugar al aire libre que hace de un domingo cualquiera, un día especial. Allí podréis ver, tocar y alimentar a un hermoso grupo de burros, quienes han sido rescatados por parte de la Asociación Amigos del Burro, con el firme objetivo de cuidarlos, protegerlos, brindarles una nueva oportunidad después de haber sido abandonados, pero sobre todo de evitar su extinción y darlos a conocer. A mi niño le ha fascinado darles zanahorias y manzanas, las cuales devoran como la más rica de las golosinas.


El Burro



También llamado Asno,  pertenece a la familia de los equinos, que incluye a los  Caballos, al Kiang (asno de la meseta tibetana), al Onagro (asno salvaje asiático) y a las Cebras africanas. Su nombre científico es Equus africanus asinus. Fue domesticado  en el Norte de África y Egipto a principios del V milenio a.C., junto al Caballo, e históricamente ha sido utilizado como animal de carga y para monta (cabalgar). Costumbre que desearíamos dejase de practicarse, ya que los pobres suelen terminar en muy malas condiciones de salud, y generalmente, suelen ser abandonados cuando ya no son de "utilidad" para el hombre. 


zanahorias burrito paseo domingo Madrid


A España los burros llegaron con la guerra napoleónica, en 1800; y en Burrolandía podréis conocer varias razas, en especial las autóctonas: andaluza-cordobesa, zamora-leonesa y catalana. Los burros tienen diferentes tamaños y colores. Generalmente miden entre 0.9 y 1.4 metros hasta la cruz, aunque las razas andaluza-cordobesa y zamora-leonesa pueden medir más de 1.6 metros. Se han visto burros catalanes de hasta 1.65 metros. En cuanto a sus colores, los hay blancos, marrones, negros, siendo el más común el gris.

Sin duda, como todos los animales, el burro merece respeto y cuidados. Recordemos que es él, "Rucío" el burro, el fiel compañero de Sancho Panza en las aventuras de Don Quijote de La Mancha. 

Hagamos todos juntos algo por quitarle el símbolo de ignorancia, ese que en historias como Pinocho, le han asignado a los asnos y que se replica a los niños que por holgazanes, no estudian. La historia ha demostrado lo trabajador que puede ser!. Que su nombre no vuelva a ser usado como calificativo peyorativo.


Burrolandia abre sus puertas al público gratuitamente los domingos (de 10:00 a 14:30 horas), permiten llevar zanahorias para darles de comer y  vale señalar que son pet freindly, así que podéis llevar a vuestro perro y que aproveche el paseo (siempre con correa y recogiendo sus cacas). Disponen de una amplia zona de parking cercana, un merendero sencillo con venta de bocadillos y bebidas, ofrecen cortos paseos en una vieja carreta para los más pequeños, e incluso hacen cumpleaños previa reservación. 

Y si os gustan las antigüedades, podéis curiosear un rato en un espacio que tienen para ellas, algo desordenado, pero interesante; eso sí, siempre bajo la atenta mirada de muchos gatos que allí habitan, unos más guapos que otros.

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